domingo, 30 de diciembre de 2012

Iriépal

Últimamente Iriépal me parece Belén, hace unos meses, en verano, con luz de mediodía, y hoy, con niebla, en su valle, con faroles naranjas y con un silencio de perros y frío.

Y en frente, también entre nubes, se veía Guadalajara, castillo de Herodes. Jeje.

Comida

Me gusta comprar comida, me gusta cocinar y saber lo que cocino, y me gusta comer, soy más de mucho que de bueno, dice Marta, y lleva razón, pero también soy más de sano, de natural, de casero que de rápido o industrial. Que a veces lo industrial está más bueno, pero me preocupa más mi tripa que mi lengua. Y cuido lo que meto en el cuerpo (y creo que es aquí donde quiero llegar con esta entrada) porque fui de estar gordo, porque pequeños caprichos me afofan, y si no lo hacen por lo menos me hacen sentir fofo, y ésa es la clave, y eso es suficiente para que en rachas de comer dulce, de correr menos, vuelva a temblar en mi cintura un lejano complejo de gordo.

viernes, 28 de diciembre de 2012

Navidad

¿Te acuerdas?, Navidad era un trozo rojo del calendario, un frío soportable, un calor de estufa en mitad de un salón de soledad, vivir contrarreloj: esta noche es Nochebuena y mañana Navidad, ya vienen los Reyes Magos y nosotros nos iremos y no volveremos más, ay, y no volveremos más.

El mundo sigue parándose en Navidad, suenan menos los teléfonos en la oficina, la gente se abriga el cariño con bufanda, cuida más la letra, todas las horas traen algo de nieve en la solapa.

No sé decir que vivo estos días sin nostalgia, porque creo que entonces tenía la alegría pero no la felicidad. No sé decir que la luz del invierno lo limpia todo, que las mañanas de Navidad son milímetro a milímetro las mismas que entonces, que por eso salir antes del trabajo es como hacerlo del cole, pero sin prisa, porque ya sabe uno que la Navidad sí vuelve.

jueves, 27 de diciembre de 2012

Mirar

Si sigues mirándome así, me caso contigo. Como sigas mirándome así me desmayo, se me ponen ojos de alianza y me desmayo, mira lo que te digo. Como tus ojos sigan queriendo entrar tan dentro de mí, te prometo que me desnudo de cintura para arriba aquí mismo, no me importa lo que digan.

Ahora bien, que sepas que no soy de las que confunden mirar con querer, anillos con lazos, ni tetas con alma, que sepas que como sólo me quieras mirándome, como te quedes a la puerta de mis ojos y vengan mal dadas y no mueves una pestaña, y no muevas ficha y me quieras, partimos peras, que dice mi abuela.

(Así piensa, me da a mí, la chica de la pareja de recién enamorados del Metro; él primerizo, ella, como siempre, esos metros por delante)

miércoles, 26 de diciembre de 2012

Espina

Siempre una espinita en el alma, por no haberlo dicho antes, por no haberlo dicho luego, por pasarme de efusivo, por quedarme corto de salero, por alargar, por abreviar la sonrisa. Quedan las relaciones, me dicen, pero yo tengo prisa, yo tengo miedo, yo tengo a veces las ideas revueltas.

Me equivoco en lo que yo más quiero, que decía Luis Rosales, descuido la hoguera y me voy a los mecheros, me pongo excusas, me anudo cuentos a la punta de la lengua, aprendo lento, me varo en lecciones circulares.

Las espinas se sacan y, si uno tiene dónde, más le vale, se guardan de recuerdo para que el próximo tropiezo por lo menos sea con una piedra distinta.

martes, 25 de diciembre de 2012

Lenguaje

Debate sobre el lenguaje, su complejidad, su simplificación, sus bes y sus uves en la sobremesa. Qué más da el tema, hablar sobre lenguaje (no sé si eso es metalingüística) se hace con lenguaje, y eso ya es gracioso, bonito, grande.

Yo creo que aquí, en este blog, persigo la palabra, las justitas, las mejores para decir lo que tengo y que se entienda. Persigo encontrarme en palabras sin perderme en el camino, sin perderme en ellas. Quiero la palabra a mi servicio, y no yo al suyo (es tan difícil eso para nosotros, que somos nuestro lenguaje, es tan difícil para mí, que la palabra me hipnotiza...).

lunes, 24 de diciembre de 2012

Cela

Dedica Cela un bloque de su libro así: "A mis amigos los robaperas, los brincatapias y los apañatundas que en el mundo han sido; no suelen prosperar demasiado ni tampoco aciertan a dejar memoria de su paso por la vida".

No sé tú, yo les guardo una pequeña rabia a los macarrillas, a los cabroncetes, a los vagos, a los que hacen con descaro lo que a mí no me sale ni sé hacer, les deseo un futuro en el que paguen en sus carnes algo de lo  que han hecho en las ajenas, pido con fuerza que sea verdad que el tiempo deja a cada uno en su sitio y que el suyo tenga, por lo menos, goteras, como dice Cela.

domingo, 23 de diciembre de 2012

Lotería

Lo digo siempre, no juego a la lotería porque soy un rácano, porque la estadística va en su contra, porque algo en ella huele a avaricia y porque prefiero dedicar la ilusión, como decía Martín Descalzo, a cosas más seguras, y además más bonitas.

Por eso también digo siempre que la lotería me tocó hace mucho, y me toca todos los días, y no enumeraré la suerte en mi vida para que no suene a cursi o tópico. Sólo diré que entre toda mi fortuna destacan, claro, familia y amigos.

sábado, 22 de diciembre de 2012

Nadar

Como viejitas de paseo, como Mary Popins si Mary Popins nadara, así se movían las 7 niñas de 100 metros espalda del campeonato de natación de Madrid. Como nenúfares lentos río abajo, como barquitos de papel en la bañera, como el que venía aquí a darse un baño, como el que no quiere hacer mucho ruido ni salpicar. Así nadaban, qué tranquilidad, las 7 niñas de 100 espalda.

Fin

Fuera de guión, hoy sí ha sido el fin del mundo de Raúl, yonqui veterano muerto de apnea. A Raúl, lo dice la corona, le querían sus padres, hermana y tíos. A Raúl lo pilló ya frío Monse, que volvía a casa a cenar y con pico para luego. Monse nerviosa llama a su madre y no al 112. No sufrió, dice el médico. Le perdonamos la blasfemia porque sabemos que se refiere a lo último, a ese dormirse entre hilos de aire, el poco que entraba ya por su pecho. Monse ha ido a la misa pero no al cementerio, le da yuyu, dice, y le espera la cunda, no lo dice, para llevarla al infierno a comprar dinamita para llegar hasta el cielo. Que ahí le espera desde hoy, en cada chute, su novio.

miércoles, 19 de diciembre de 2012

Amistad

A mí El Señor de los Anillos me pone siempre la piel de gallina, porque a uno siempre se le olvida que la amistad (que es una de las formas del amor, una de las más limpias formas del amor) puede mover montañas, llegar a Mórdor, mearse en el fogón y volver a casa silbando. A uno se le olvida lo de siempre, que el bien es más fuerte que el mal, y Frodo se lo recuerda.

Corazón

Hoy, mientras me trabajaban la energía de corazón en clase, que es una energía muy bonita, porque integra en ti lo que te ha pasado, lo convierte en ti, me he acordado de mi padre.

Quería volver a coger la pluma y escribirte: qué feo engañarnos, qué poco elegante aprovecharte de nuestra confianza, qué abuso; y qué poco se respeta al que no respeta: ya no te respeto, por eso te zumbo cuando sueño, por eso te insultaría, porque tú me has insultado; qué curioso, si volvieras haríamos por perdornarte, qué difícil sería perdonarte; qué pañuelo le tenía puesto a esto, el de tu locura, que me había hecho aparcar lo feo de tu cara roja mitiéndonos y llorando de miedo; qué hortera, qué pollafría, qué tipicazo irse tras un coño y encima con portazo, peinarse para atrás y comprar regalos tristes; eres tan distinto de mi padre que casi me haces olvidarle.

(Agradezco a la energía de corazón su ola de fuego, jeje, que ha aflojado algunas tuercas de mi chasis).

lunes, 17 de diciembre de 2012

Presumir

Ay de los que presumen de tomarse la vida con humor (por ejemplo), porque todavía no lo hacen sin darse cuenta.

Desde luego que el camino empieza con pasos que uno no sabe dar, pero, ay otra vez, el de pocos acaba con pasos que uno no sabe que da. A esos, a los que vuelan, a los que no dicen "si es que hay que reírse" sino que se ríen, a esos quiero parecerme yo.

domingo, 16 de diciembre de 2012

Sufrir

Sufrir porque uno quiere es algo que muchos hacen; yo lo hago cuando corro, sufro un poquito, sufro lo que quiero sufrir, me ducho y me tumbo satisfecho a descansar de ese sufrir de quita y pon.

Hoy en la Media he sufrido más de lo que quería. No consistía en bajar el ritmo para sufrir menos como otras veces: la pierna me dolía igual a cualquier ritmo, por eso había que acabar cuanto antes y ya está (la decisión de dejar de sufrir abandonando no entraba en mis planes orgullosos, en los 2 meses de entrenar con un objetivo que se había disuelto hacía kilómetros).

Lo educativo de esta vez no ha sido el sufrimiento. Hoy le ha tocado al azar (otro gran invitado de las lecciones que aprendo), a lo que se me escapa, a lo que ni 2 meses ni 10 fisios pueden dominar. Porque ni rogar ni dar con el mazo valen cuando no hay clavo.

Cuidar

La barba, la familia, los detalles. Lo que digo, lo que pienso, lo que hago. La letra, el cuerpo, los zapatos.

Se me olvida cuidar las cosas, me creo que ya está todo hecho, y las rentas duran poco o nada. Hay que vencer la pereza, hay que mirarse al espejo, hay que visarse por dentro. Los donBoscos, las madreTeresas, los mejores no dejaron de buscarse, de pulirse, y yo, como siempre, quiero mariposa sin gusano.

viernes, 14 de diciembre de 2012

Encontrarnos

Dices qué suerte habernos encontrado. Y me enternece.

La RAE es muy graciosa en las 2 primeras acepciones:

encontrar
1. Dar con alguien o algo que se busca.
2. Dar con alguien o algo sin buscarlo.

Digo qué suerte habernos encontrado (los dos, y sin buscarnos) después de habernos encontrado (cada uno a sí mismo, buscándonos por dentro, ya sabes).

Yo ya no sé qué es más importante, si buscar o si encontrar, si cómo empieza, si cómo acaba o si el paseo, si la intención, si el fin, los medios, si participar o si ganar. Creo que la RAE al final se pone seria y me contesta:

encontrar
9. Hallar algo que causa sorpresa.

La ceremonia del té es un baile de vajilla, es un pájaro de plumas marrones que pía a soledad.

miércoles, 12 de diciembre de 2012

Isaías

Y hoy Isaías responde a lo de ayer: se salvan los que quieren salvarse, vuelan los que aprietan, como en un wáter, hasta que les salen las alas. Se cansan los que se paran a ver si están cansados, se mueren (otra vez Neruda) los que leen el diagnóstico.

Yo creo que se me entiende, yo quiero seguir saltando de florecilla en florecilla (no sé cómo hacen mis pies para apoyarse a lo largo del día en ilusiones tan pequeñas, tan absurdas) y mirar poco al abismo.

martes, 11 de diciembre de 2012

Dura vida

¿La vida es dura? Me mandaba esta mañana Luis un artículo que decía (eso he querido leer yo) que no es plan hacerse la vida más dura de lo que es, que sin penas los panes saben mejor, que la vida (siempre llegamos al mismo sitio) es del color del cristal con que se mira.

Yo sigo creyéndolo: la vida va a lo suyo, la vida es lo que es y no siempre lo que queremos que sea, qué se le va a hacer. Pero a la vida le vamos poniendo nota, manos (la vida nos estrangula), pies (la vida corre muy rápido) y más pegotes que acaban haciéndola responsable de todo, que acaban haciéndola mala, triste, porque al principio hemos confundido al caballo con el jinete.

lunes, 10 de diciembre de 2012

Natural

Tu truco es no mirarte al espejo, no pesarte el pan, no medir tus pasos, no centrarte la coleta. Tu eres bella desde tu cadera terráquea y materna hasta la punta de tu pie dormido en calcetín de jirafas. Eres guapa porque no sabes que te graban, que mis ojos andan recogiendo cada gota de luz que cae de los tuyos.

Calor

El calor que queda en la ropa cuando te la quitas, ¿será eso poesía?

domingo, 9 de diciembre de 2012

Poesía

¿Tendré todavía reprís para la poesía?, es decir, ¿podré rimar melón con jamón sin que sepa rancio?, ¿sabré hablar del amor y que se me entienda, de la muerte y que se me entienda, por ejemplo? ¿Alguna vez hice poesía, o leía y copiaba mezclando y parecía que salía algo nuevo?

Si la poesía, como la fe, el shiatsu, el amor, es una actitud, una forma de ver la vida, ¿dará lo mismo que yo ya no parta mis frases en falsos versos?, ¿disfrutar una puesta de sol es ser pintor? Si este blog es un mapa, ¿qué se estará dibujando, un laberinto imposible o la estrecha senda de la poesía?

sábado, 8 de diciembre de 2012

Gaudí

Que en catalán vale para decir disfruté y disfrutó. Y así se podría dejar la crónica de Barcelona. Pero diré que Gaudí temía utilizar ciertas técnicas de construcción por si no funcionaban, porque no las había usado nadie antes. Lo gracioso de los genios es que a veces no se dan cuenta de que lo son.

miércoles, 5 de diciembre de 2012

Cine

El mal que ha hecho el cine: nos ha obligado a sentir cosas que no sentíamos. El cine nos ha dado besos, bodas, frases, puñetazos, primeros planos que no son verdad.

La vida no es cine, lo real es siempre más inesperado que lo imaginario, casi siempre porque de la realidad esperamos poco y porque después de todo la imaginación come en el restaurante de lo común. Yo soy de tus 2 centímetros de más, de tus 6 centímetros de menos, que decía Benedetti. Yo soy de quedarme sin frasacas, sin discursos ni brindis, sin polvos del siglo, sin contigos para siempre. Yo soy más de encontrarme en tu normalidad, qué sorpresa, lo extraordinario.

lunes, 3 de diciembre de 2012

¿Has cambiado?

Si te oyera Heráclito se revolvería en sus aguas, si te oyeran mis células, las pobres, más lentas cada día, si te oyera mi blog... Claro que uno cambia, milímetros o años de golpe, claro que uno no sabe hacia dónde.

Hasta hoy yo no sabía, por ejemplo, que las hojas moradas de una lombarda parecían alas de ángel triste. Y todavía me preguntas si he cambiado.

domingo, 2 de diciembre de 2012

Picasso

Lo que pasa es que quiero escribir como pintaba Picasso: 2 brochazos y arte.

Lo que pasa es que este blog no querría ser un jefe indio, un abuelo de voz honda, un rincón de frasecitas, y a veces lo es.

Lo que pasa es que durante el día se me ocurren veinte temas para escribir, y llega la hora y no sé con cuál quedarme.

Lo que también pasa es que llega la hora y estoy cansado, quiero escribir y llego sin fuelle.

No son excusas, es un vistazo, un análisis al vuelo con una conclusión vieja de san Juan de la Cruz: para venir a lo que no eres has de ir por donde no eres. Y yo queriendo saltarme pasos, ser Picasso sin ser antes Pablo.

Opinión

Ahora que me van pasando más cosas no sé si voy teniendo más derecho a dar mi opinión sobre esllas. O más que mi opinión, mi sensación, lo que yo he sentido: se puede atravesar un desierto de fuego en chanclas, se sale vivo, el odio es solo una palabra, el odio, y otras, es una palabra que solo aparece en las películas americanas, la cultura, por decir una de la lista, está sobrevalorada (lo dice Luis), la gente es buena, la felicidad es corolario de la risa y no al revés.

miércoles, 28 de noviembre de 2012

Humor

Hoy, sin querer, por hacer una gracia, me ha salido una frase como de tío interesante, un juego de palabras de filosofete: el humor es ciego.

Era para decir que todo admite humor, que ay de los tristes que no saben reírse de sí mismos.

Le tengo mucha fe yo al humor, y sé que cuanto más lo defiendo, cuanto más frases le hago, más fuerza pierdo. Yo no sé si sé explicar lo del humor, yo no sé si los demás sabrán lo que significa para mí el humor, una tarea, una decisión, uno de los finos hilos de la felicidad.

martes, 27 de noviembre de 2012

Eficiencia

No sé cómo lo dice Luis Ángel: a veces hay que ser ineficiente, o, la poesía no es eficiente, o, lo ineficiente es bello. No sé cómo lo dice, le queda muy redondo y se entiende a la primera.

Ineficiente es mi trabajo, pero no es bello. Ineficiente es este blog, puede que para mí sea poesía (en el sentido más inútil de la palabra, letras y letras para autocontarme siempre lo mismo). Me miro y me veo muy eficiente, más eficiente que hace años. Y no me gusta, claro, porque a la felicidad (puede que en el fondo lo que diga Luis Ángel sea esto) sólo se llega perdiendo.

lunes, 26 de noviembre de 2012

Alfombra

Hoy alfombra roja para entrar a trabajar: un ciruelo chino en el parque de entrada al edificio ha empezado a desnudarse de sus hojas rojas.

Y todavía hay quien dice que los lunes son un infierno.

domingo, 25 de noviembre de 2012

Gotas

Las que colman vasos, las frías (pero no las de clima, sino las que caen, qué susto, por la espalda), las gordas que se sudan (yo esta mañana he sudado un poco de esa gran gota, que he corrido mucho, hacía mucho que no corría mucho), las de colirio que escuecen en nuestra memoria inventona de niños, las de pegamento que no pegan todo lo que querríamos, las de pegamento que pegan lo que no queremos, y las de arena que decía la Nana, que ahora me cierran los ojos.

sábado, 24 de noviembre de 2012

Otoño

Yo no sé si es ponerse muy cursi decir que hoy hacía una tarde muy bonita, que el campo olía dulce, a hojas mojadas, que el sol sabía dónde ponerse para que el color del suelo fuese de bizcocho, y que los árboles se habían quedado a mitad de strip tease porque el aire ya va sabiendo a chimenea.

Es un gusto saber que el otoño volverá aunque deje de explicarse en los temarios de Primaria y en el Tiempo de La 1, que el otoño, como tantas cosas, es una emoción (una emoción que vuelve).

viernes, 23 de noviembre de 2012

Sutil

No sé si es mucho decir que lo importante es sutil, o decir que lo importante es lento, o silencioso. No sé, porque igual es una percepción personal, porque igual para mí lo importante es que las cosas suenen poco y lleven paso seguro. Porque no leo los periódicos, porque en mi adolescencia, tal vez, me quedaba mirando desde fuera besos, promesas y gritos que quedaron en agua de borrajas. Porque creo mucho, puede que demasiado, en el tiempo, en el trabajo, en las hormigas.

Y este amor que a la fuerza empezó sutil (subtilis, bajo la tela, que es algo muy erótico) lo ha seguido siendo, sin aspavientos ni grandes verbos, con una fuerza mínima que nos junta sin darnos cuenta bajo la tela.

miércoles, 21 de noviembre de 2012

Otra vez

Me intimida el olor de los hombres volviendo de comer, como si trajeran calamares en el pelo, dejando un rastro de aceite en el aire, yo qué sé cuántos litros de vinagre metido entre las uñas, las barbas mojadas en pisto.

Me hacen llorar las caras blancas y cuello rojo como flamencos, las manos grandes de tabaco, colonia y bolsillo, los peines de nuestro pelo niño, el calor, las palabras, la luz que había en un soplido, la risa roja que me quería. ¿Qué haremos con todo, cuando todo esté a punto de perderse, de olvidarse? Recordarlo, recalentarlo, revivirlo, por supuesto.

martes, 20 de noviembre de 2012

Mestre

Una frase de Juan Carlos Mestre que me ha dejado el día entero dándole vueltas, por lo circular, lo comestible y lo relámpago:

"Toda la noche llamó la noche a los caballos"

lunes, 19 de noviembre de 2012

Papelera

En el baño del trabajo hay una papelera de ésas de pisar y levantar la tapa para echar las toallitas de papel. A media mañana ya hay papeles sobre la tapa y por el suelo. Piensas, ya está llena. Pisas, se abre la tapa, está medio vacía.

Más allá de lo guarra o lo vaga que sea la gente, me quedo con el que ve la primera toallita en el suelo y no abre la tapa y deja la suya también fuera pensando que la papelera está llena. Cuánto habrá de verdad en los grandes problemas de mucha gente, en el ruido de las noticias, en las crisis que nos creemos, en los rumores derrotistas. Lo difícil que es a veces andar levantando tapas.

domingo, 18 de noviembre de 2012

Perfecto

Siempre puede uno hacer más de lo que hace, siempre un poco más, un poco más de tiempo, un poco más larga la zancada, más hecha la tortilla, más largos los besos, más cortos los chistes, más sabios los consejos, más atenta la mirada, más largos los brazos, más bonitos los regalos, más larga la cadena.

Elegir dónde parar debe de ser lo sano, pero también lo difícil, alcanzar el máximo viable, no el posible, encontrar nuestro mejor yo, que decía Salinas, sin caer al otro lado del barranco.

sábado, 17 de noviembre de 2012

Sencillo

Sigo buscando la esencia. Antes, de pequeño, casi todo era oscuro, tenía pocas cosas pero ya me parecían muchas, y pensaba que de mayor sería como los mayores y tendría todavía más cosas (pensaba que llevaría gafas, que tendría libros, que mi teoría de la vida se haría más grande, se le sumarían experiencias, frasecitas y fotos). Pero no, cuanto más avanzo menos me va quedando, menos ideas claras pero cada vez más claras. Casi no tengo libros y casi ninguno de esos es mi favorito, no tengo poemarios, las publicaciones que tanto visten, sino creo que escribo el mismo poema todo el rato, el mismo poema en versiones distintas, el señor gordo que era Dios, por ejemplo, es ahora un palillo para vivir, no para estudiar, desbrozo parafernalias, pido sencillez, quiero amigos desnudos, amor en pantuflas.

viernes, 16 de noviembre de 2012

Constipado

Y enfadado. Hoy me pueden los mocos, esta mosca en la cabeza, dolorcitos en los dedos, los gemelos, la garganta. Hoy no puedo predicar paciencia, o por lo menos no puedo predicarla con el ejemplo. Hoy, otra vez, la Naturaleza me humilla, me manda al humus, al suelo, me recuerda que yo mismo soy humus, humano. Y yo se lo agradezco, pero enfadado.

jueves, 15 de noviembre de 2012

Comunicar

Cuánta gente habla, cuánta gente escribe, la de periodistas que hay, la de libros que se publican, la de profes que tuvimos, la de temas que se tratan, la de cosas que se dicen. Y qué poco de todo esto llega, cala, engancha. Qué difícil es acertar en el cómo, por eso hay pocos grandes poetas, pocos buenos periodistas, pocos maestros maestros.

miércoles, 14 de noviembre de 2012

En tres palabras

Frío por las mañanas, miedo a constiparme para la carrera, Marta riéndose, oh, eso es lo mejor de estos días, Marta riéndose, shiatsus a 14 almas distintas y tan iguales, a todos nos duele lo mismo: los lumbares, los hombros y la soledad, todos hablamos el mismo lenguaje, sonrío y la cara del otro se vuelve espejo y sonríe, después de 15 minutos de tocar una espalda ya no eres el desconocido del principio, ya le has abierto al otro si no tus puertas, por lo menos las suyas, y entonces cuenta cosas que no iba a contar, y te da las gracias, ha pagado y te da las gracias porque cree que lo que ha pagado es poco para lo que tú le has dado, y tú sientes que sus gracias son mucho para lo que tú le has dado, tú has hecho una secuencia tipo y a veces te has despistado. Ya decía Machado lo de confundir valor y precio. Qué envidia la gente que, sin conocer a Machado, los diferencia enseguida.

Vuelvo

No es culpa mía, es que llevo unos días sin tiempo y otros sin Internet, pero sigo con las ganas de escribir apretándome en la garganta, como el primer día, que dirían los cursis.

sábado, 10 de noviembre de 2012

Lluvia y mar

Será porque soy de interior, pero el mar me abruma y la lluvia me relaja. El mar se me hace grande y la lluvia son como muchos pequeños mares, el mar huele sólo a mar, tapa cualquier olor, la lluvia realza el olor de lo que moja, la lluvia huele por otros.

No sé de dónde me viene esta pasión por la lluvia, estas ganas de ser pez y nadar en la humedad del aire.

viernes, 9 de noviembre de 2012

Parejas

Dios los cría, por caminos y con métodos y pucheros distintos, y ellos se juntan, tejen sus vidas, sus diferencias, sus pasiones nadie saben cómo en un amor que el papel no sostendría.

jueves, 8 de noviembre de 2012

Más lluvia

Los perros con chubasquero un día se darán la vuelta, gruñirán a la mano que los tapa y saldrán a la calle a pelo, porque el chambergo les deja con el instinto a flor de piel, con la libertad que da la lluvia como sonriéndole detrás de un burladero.

Sigue lloviendo suave y a ratos, o a chaparrones y a 26ºC, no se le va de las manos al cielo la rabia, no tiene prisa por contarnos gota a gota su verano, su desierto, sabe que tiene día y noche (de noche nos canta más suave, nos explica más despacio) para verterlo todo.

Yo, ya sabes, envidio la paciencia de la Naturaleza y en este caso la del cielo, la facilidad, la falta de vergüenza para llorar y descubrirse. A los que no envidio nada es a los perros con chubasquero, más bien les compadezco, seguramente sea yo el que les da envidia: corro con lluvia, me entorna los ojos, me cuenta cosas al oído, vuelve a educarme en humildad.

miércoles, 7 de noviembre de 2012

Varias cosas

Ayer hablaba Cela de la gente correcta correctísima toda su vida, carne de manicomio el día que les da por hacer, decir, vivir de golpe todas las locuras que no han vivido.

Ayer hablaba Cela de la conformidad, o sea, de la cintura, de la sonrisa, de la perspectiva.

Ayer hablaba el Evangelio de que la felicidad no es un producto de lujo, pero que siempre encontramos excusas para no comprarla. Hoy decía que a veces hay que abandonar ciertas cosas para conseguir otras.

Hoy hablaba Marta de no dejar escapar las cosas, los momentos.

Total, que todo me habla de lo mismo, o que en todo me encargo de escuchar lo mismo, que esta entrada de varias cosas es de una sola, que me repito al decir que me repito, que me repito al repetirme mis conclusiones, y que ni aún así me las aprendo.

lunes, 5 de noviembre de 2012

Ciruela

Una ciruela con el corazón roto, con el hueso partido, es algo inexplicable y también irreparable. Hoy me he cenado algo imposible, la ciruela prima de la aceituna del chiste que se cae y se rompe un hueso, la ciruela que escondía en su madurez un corazón repartido, abierto al público. Qué honor comerse una ciruela mártir, una ciruela que un día se entregó y ya no pudo dar un paso atrás, ya no hubo escayola ni reposo que la soldase, sino que querer la dividió para siempre.

(Siempre lleva razón José Hierro, y aquél que ha sentido en su mano temblar la alegría no podrá morir nunca)

domingo, 4 de noviembre de 2012

Amigos

Aparte de aquella sensación de no merecer ciertos cariños, de no saber corresponderlos, de ser sólo receptor, hoy me sorprende lo sutil, lo constante pero prudente de la insistencia de mis amigos, lo querido que me siento por teléfono, por mensaje, por lo que sea.

Uno tiene la sensación de que pasa un poco rápido por las cosas, un poco por encima de ellas, que no responde como debe a lo que recibe, ni con el tiempo ni con la pasión que merece. Uno tiene sensación de que va un poco a lo suyo y de que, no sabe por qué, la vida le regala amigos. Por supuesto, los acepto, pero no dejan de sorprenderme.

sábado, 3 de noviembre de 2012

Hombro

Hoy tu hombro vuelve a dejar a este blog a su altura (apenas milímetros), y querernos es hablarnos.

Correo

Hoy tocaba soltar en 3 frases lo cocido durante un año, incluido lo utilizable de lo que ha caído por este blog. No sé si he estado bien, a la altura de mis expectativas, si he sido muy brusco, si lo he dejado claro, si la brusquedad ha hecho sombra al mensaje, si me he dejado algo sin decir. Había mucho que decir, o poco, pero importante, condensado, y la certeza de que caerá en saco roto, que siempre desmotiva un poco pero también le quita a uno presión.

Yo le escribía a ese señor con cara roja que dio un portazo en nuestras vidas. Por eso (porque ese señor entiende lo poco que entiende, y porque yo lo he escrito sin amor) seguramente entienda el sopapo como insulto y no como despertador. Da igual, a él no le voy a cambiar, por eso no le he dicho nada en todo este tiempo. Al que le debería haber cambiado ese correo es a mí, dicen los que saben, haberme liberado. De momento no he sentido liberación, pero tampoco otras cosas (salvo el enfado inicial). Habrá que esperar a mañana, o a su respuesta (siempre guarda uno 2 gotitas de esperanza, una para que caiga en la cuenta y otra, por si no cae, para que se enfade y le duela un poquito, una pequeña parte de lo que nos duele a nosotros; y es que es mentira lo que le he dicho, no le he perdonado, aunque también lo dijera aquí, al señor de Galicia yo no le entiendo ni le perdono). Habrá que esperar, decía, a ver si este correo me trae algo nuevo para el corazón: menos rabia, más perdón, otra tranquilidad, y cosas así.



jueves, 1 de noviembre de 2012

Pareja perfecta

Ella se gusta tanto que intenta verse en las pupilas de él. Él se gusta tanto, está tan seguro de sí mismo, que puede permitirse rascarse la barbita buscando un grano, un pelo duro, no sé, sin llegar a dar asco. Ella está tan enamorada (de él y de ella misma, tan orgullosa de haber conseguido esa pieza) que lo va contando a todos. Él está esperando a lo que vendrá depués de comerse las pizzas. Ella está tan buena, se da tanta caña en el gimnasio, que puede comer pizza como si no le importara que le engordara, ella, con perdón, come la pizza como si fuera otra cosa. Él se levanta a por algo, unas servilletas, sí, y mira alrededor, a otra mesita con 2 chicas, por si le miran, porque sabe que le van a mirar.

Siempre queda la duda, lástima que el INE no lleve la cuenta, de cuántas de estas parejas de catálogo, de ego frente a ego, terminarán bien. Yo sólo espero que todos (ellos 2 dentro de la relación, yo de mirón) maduremos con estas cosas, saquemos las lecciones que debemos.

Familia

Como agua, porque en ella peso menos, porque de ella salgo limpio, porque no hay sopresas, ni trampa. Como aire, porque me sigue dando vida, porque me rodea, me empuja. Y creo que así sigo sin explicar todo, ni una parte, pero es que haría falta empezar por mi definición, hablar de por qué muero, para intentar entender algo.

miércoles, 31 de octubre de 2012

Tanto

Farmacias con cruces verdes tan intensas, tan intensas que duele mirarlas, lluvia loca llorada de golpe por nubes aguantándose desde el verano, preguntas que llueven como arroz de boda, mis dedos buscando con hambre el calor en tu piel, la policía seria en sus cascos esperando a que escampe la crisis y sus pancartas, palabras balsámicas que curan de pronto epitelios, palabras que me persiguen a mí, como dice Rojas, y no al revés, un dominó de casualidades que encajan de repente, o sea, la misma rima en todas las doctrinas, el mismo ritmo, quiero decir, la misma música de fondo en todo, da igual lo que leas, la misma conclusión, la misma luz, el mismo asombro: el de la certeza de que la vida es todo esto, que es tanto como uno quiera ver.

lunes, 29 de octubre de 2012

Humo

He llegado a casa oliendo a humo, la cazadora traía de la calle el olor a humo de no sé dónde. Sí, el último patio es el que olía, pero de dónde venía el olor en un barrio de pisos. No sé si arden las raíces bajo tierra en el otoño, si el frío de fuera se vuelve amor por dentro, si las hojas queman su alma en la caída.

La cazadora va cogiendo los olores del invierno, así llegará un momento en que tenga grados bajo cero, litros de sol frío, la luz pura, sin el añadido del calor, que tiene el invierno.

domingo, 28 de octubre de 2012

Otra lágrima

Pongo otra porque he perdido la cuenta, y porque en principio no tiene que ver con el resto de lágrimas, pero es que igual sí tiene que ver, y era parte de lo que me quedaba por echar.

Me he emocionado hoy en misa, en Salesianos, porque he vuelto a ver que mucho de lo que soy lo saqué de allí. La alegría, la forma de ver la vida, de ver la religión, la gente, el compromiso, cosas pequeñas que me acompañan.

Y por la última frase de la primera canción del coro "y es preciso que volvamos a ser profetas que no le teman a nada", y he pensado en la crisis, y en mi madre, y en Marta y en los gordos, con lágrima, claro.

Hacer de tripas corazón

En eso creo que consiste ser madre, estar embarazada, quiero decir, llevar un niño dentro. Y de ahí la belleza del asunto, y todo lo inexplicable de después.

viernes, 26 de octubre de 2012

Separados

Paro aquí un ratito para imaginarme el color de las tardes de los viernes para el hijo de padres separados de esta tarde en Atocha. El niño tocacaras, el niño que no llora porque si no se queda feo, que se lo ha dicho una señora, tenía hoy intercambio, transvase, cesión, no sé, como se llame a pasarse a un niño deprisa y corriendo, hola y adiós, en un andén de Atocha.

A mí estas cosas, que no sé de sociología, ni de psicología, ni de pedagogía, ni de nada, me ponen simplemente triste, me ponen amarillo-naranja, que aquí no es un cinturón de kárate sino el color de las tardes de los viernes para el niño moneda.

miércoles, 24 de octubre de 2012

Farolas

Últimamente cuando vuelvo de correr por el campo ya se está haciendo de noche pero todavía se ve bien. Tengo que llegar a la ciudad y ver las farolas encendidas para decir ¿será más tarde de lo que pensaba?, ¿habré estado corriendo a oscuras sin darme cuenta?

Me pasa como a Neruda, que el médico le diagnosticaba la muerte pero él se sentía vivo.

martes, 23 de octubre de 2012

Gente

De cerca nadie es normal. Era el título de una obra de teatro.

Hoy ha habido Jornada de puertas abiertas en la Escuela de Shiatsu. Uno abre sus puertas, las físicas, y la gente te abre las de su corazón. La gente tiene de todo (quistes infracondrales en el acetábulo derecho, el dedo gordo roto contra una cama, tres entierros en un mes, preocupaciones, ahogos, taquicardias, sentido del humor, sentido del ridículo, desconfianza, ganas de curarse...). La gente, y la gente soy yo, es una capita de azulejos y detrás hormigón, ladrillo, lana aislante, tuberías, argamasa de amor y miedos, subconjuntos de pasiones, ruiditos que se juntan en sinfonías de ilusión, y todo eso que sostiene, que da cuerpo, menos mal, a nuestra fachada.

Arruga

Si te fijas se me ve. Debajo del ojo derecho. ¿De qué es? No sé. Igual de reírme, o de llorar, o de aguantarme las lágrimas, o de pensar, o de la edad, o de no usar gafas de sol en verano, o en invierno, o de los nervios, no sé. Es grande, claro, es un pliegue grande. Me ha dado miedo por si se me quedan los ojos de mi padre (los ojos de mi padre no me han gustado nunca mucho), por si estoy haciendo algo mal por dentro y se me nota por fuera, por si eso es la primera rajita de un terremoto, la punta de un iceberg de penas que no salen, de preocupaciones que se quedan a dormir debajo del ojo derecho.

De momento me he echado una cremita de no sé qué. Mañana seguiré con el tratamiento: volar en globo con gas de garbanzo, ducharme con tus axilas la risa y viceversa, y meterme en la cama y que tu calor a 20 centímetros me haga la permanente en los pelos del pecho, dejando un círculo, como de una pera, en la pechuga izquierda.

domingo, 21 de octubre de 2012

Hablar

Dice Punset, no estoy de acuerdo, que el lenguaje no sirve para entendernos sino para lo contrario, para liarnos y discutir.

Pienso que el lenguaje nos cuece desde dentro (somos lo que pensamos y pensamos con el lenguaje y todo eso), o sea, nos define y nos ayuda a definirnos.

Los políticos usan mal el lenguaje, y los periodistas, y no me refiero a faltas de ortografía sino de limpieza, pero el resto (los políticos y los periodistas en su casa seguro que también) aprovechamos lo mejor que podemos lo que nos da el lenguaje. Y como el lenguaje nos da mucho y nosotros lo aprovechamos bien, avanzamos: nos desnudamos al hablar del tiempo con o sin pesimismos, nos queremos con adverbios de tiempo, lloramos entre interrogaciones y nos damos así en palabras que son más nuestras, más nosotros, que nuestro color de ojos.

(Siempre que salgo de hablar con Marta, sobre todo cuando discutimos, me siento más cerca de ella).

Encéfalo

Hay unas venitas en el encéfalo tan especializadas que la vaina interna, por donde pasa la sangre, retiene partículas microscópicas, virus, bacterias para evitar daños a las neuronas. Siempre me pasa igual, estas cosas me flipan, la máquina perfecta e imposible que somos me maravilla. Como decía Joseda, la vida es tan improbable que puede decirse que es un error. Somos una pirueta de la Naturaleza, una reunión imposible de casualidades y precisiones, una llamita cabezota en mitad de la tempestad.

viernes, 19 de octubre de 2012

Aplazar

Porque posponer no sé bien cómo se escribe, y porque suena como a dejadez. Y aplazar es dar un plazo, dejar un tiempo.

Algunas cosas hay que intentar no aplazarlas, por si mañana nunca viene, ya sabemos. Pero hay veces que a la fuerza ahorcan y no queda más remedio que meterse las manos en los bolsillos, poner en barbecho el cariño, y darse la vuelta, para volver a coger carrerilla.

Aquí anda latiendo, o latente, toda la creatividad, todo el tiempo, el hueco de huerto que guardo para las flores que quiero.

miércoles, 17 de octubre de 2012

Afectos

Cada una de las pasiones del ánimo, como la ira, el odio, etc., y especialmente el amor o el cariño.

Quedan los afectos, nos mueven los afectos (también podría poner éstas en cursiva, no son definiciones pero son muy oídas).

A mi padre le quedan los afectos, o algo parecido, le quedan las fotos, las de cámara y las mentales, los fogonazos que le traen a nosotros. A mí todos los días me llegan muchas fotos de mi padre, podría juntarlas y hacer un corto, un corto de risas y de prudencia y de incondicionalidad, no llegan fotos tristes.

Decidimos con las tripas, recordamos con el corazón, la pasión, menos mal, no nos abandona nunca, lo mancha todo, lo cambia todo, fotografía, ya lo he dicho, lo que quiere y desde el lado que quiere.

Afecto es el resultado de una cosa que actúa junto a uno (ad-) y hace algo en él (-facto).

Dichosos los afectados, los que se dejan afectar, porque de ellos es la vida.

martes, 16 de octubre de 2012

Paciencia (2)

(Hago esto como ejercicio, no literario, sino de paciencia)

Aquí te pillo, aquí te mato, aquí te escribo, aquí te mando. Lo que escribí ayer fue un mojón, pero ahí se va a quedar, para que vuelva a recordarme los tiempos de cocción de los huevos, los días de reposo de las lesiones, las gotas que forman la tormenta, las pequeñas desilusiones que suman una ilusión, las zancadas que hay que dar para bajar 100 gramos, los mordiscos de pinza que vencen un entrecejo, los minutos que he pasado mirándote para seguir viéndote cuando parpadeo.

Cuarta gota

¿Sabéis en qué noto que os echo de menos? En que pienso que el mundo es un poco menos bonito que antes.

lunes, 15 de octubre de 2012

Paciencia

Tengo poca paciencia. A veces creo que he avanzado, que he madurado, que aguanto más que antes. Pero no, en efecto dominó, una vez perdida la paciencia con una cosa ya no dejo pasar ni una, y me hierve la sangre una palabra, unos cascos altos, otra impaciencia... Jo, me queda mucho que andar.

sábado, 13 de octubre de 2012

Segunda y tercera gotas

(Echadas en el sofá)

La segunda porque hoy la vida ha vuelto a ser más fuerte que la muerte y Blanca ya ha gritado aquí estoy. Porque la vida da sus pasos y Elena hace nada era solo hija y ya es remadre...

La tercera porque no nos hemos protegido de la ilusión. De ilusión también se vive, dicen. No, es que sólo se puede vivir de ilusión, lo demás es cáscara, ceniza, nada.

Primera gota

(Caída en el hombro de Marta)

No sé cómo sentirme, el martes no sabía si ir a clase o quedarme con Marta en un banco, por ejemplo. Tengo miedo a que me llamen triste, pero creo que tengo más miedo a estarlo. No sé cómo me siento, si me buceo veo racionalismo, practicidad, pero también veo palmeras de chocolate, crema antiestrías y besetes. No quiero ser sensiblón, no quiero ser piedra. Lo que quiero es a vosotros.

Privilegiados los 4 el tiempo que fuimos uno. Os quisimos mucho, no sé si os llegó, e hicisteis que nos  queramos más.

Dice García Márquez que la poesía es la única prueba de que el hombre existe. Yo sigo escribiendo poemas en el hombro de Mamá, para no dejar de existir.

jueves, 11 de octubre de 2012

Llorar

Llorar para dentro es malo, puede acabar convirtiéndose en un llorar por dentro, que es algo enquistado y triste. Hay que llorarlo bien, como dice Girondo, pero llorarlo mucho puede acabar ahogando la risa y etcétera. De todas formas, yo suelo llorar poco las cosas, me quedo corto, quiero decir, y luego, de repente, me sale un bulto en el ánimo, una contractura en el hombro, un padrastro en el corazón.

Total, que habrá que llorar, aunque cueste empezar.

miércoles, 10 de octubre de 2012

Charcos

Creamos en la bondad, seamos ingenuos, insensatos, sintamos (nótese la curiosidad: en inglés sensato es "sensible", y yo aquí sensato lo uso con el significado de insensible), mojémonos hasta las cejas, dejemos las melindres, las medidas, los comedimientos. Tengamos fe, seamos los ventrículos del amor, queramos con el vientre, comamos con las manos, comámonos la vida con las manos, que detrás de todo no hay nada, que la cosa está dentro, como en los charcos, saltarlos es lo sensato, pisarlos lo divertido.

martes, 9 de octubre de 2012

Que nos quiten lo bailao

O lo que la Naturaleza no da, Salamanca no lo presta. O el viento hoy no ha sido propicio. O todos los ríos van al mar, pero el mar no se llena. O pero aquél que ha sentido en sus manos temblar la alegría no podrá morir nunca. U os queríamos nada más que de oídas. O gritar a los sordos es el pan de los felices. O aquí no hay justicia, ecuaciones, estadísticas ni más cera que la que arde.

Y repetiremos lo mismo tantas veces como venga, porque querer, latir es lo primero que pasa, viene escrito no sé dónde y, hasta apagado, vuestro corazón sigue rebotando tumtumtum, alegre, en nuestro corazón.

lunes, 8 de octubre de 2012

Mila Kunis

La mujer más sexi del mundo. Y todavía habrá algunas que persigan poder meterse en sus bragas (en las de Mila), pintarse los ojos del tono en que se los pinta ella y etcétera. Todavía quedarán algunas que no sepan que la belleza, como tantas cosas, es una actitud, una decisión, que el erotismo empieza en la naturalidad, y más, en lo natural, y más, en lo cotidiano, en lo mínimo.

Que llore Mila sin tu axila, sin tu pie, sin tus dientes desordenados como notas de una fuga.

domingo, 7 de octubre de 2012

Rutina

(Me estoy leyendo "El guardián entre el centeno". Copio un trozo sobre un museo al que el chaval iba todos los sábados cuando estaba en el cole)

"Pero lo que más me gustaba de aquel museo era que todo estaba siempre en el mismo sitio. No cambiaba nada. Lo único que cambiaba era uno mismo. No es que fueras mucho mayor. Sólo que eras diferente. Eso es todo. Llevabas un abrigo distinto, o tu compañera tenía escarlatina, o la señorita Aigletinger no había podido venir y nos llevaba una sustituta, o aquella mañana habías oído a tus padres pelearse en el baño, o acababas de pasar en la calle junto a uno de esos charcos llenos del arco iris de la gasolina. Vamos, que siempre pasaba algo que te hacía diferente."

(Y eso es lo que me encanta de la rutina, el matiz, lo extraordinario)

sábado, 6 de octubre de 2012

Viejas

Ya lo he dicho por aquí, pero lo repito: las lecciones se olvidan.

"No hay mayor pobreza que la soledad", decía la Madre Teresa. Aún así, me preocupo por la crisis, los michelines, las prácticas de shiatsu, la contractura del gemelo.

Ayer nos hablaba una vieja en el asilo y nos decía verdades, una o dos, cada uno tiene siempre dos o tres versiones de su única verdad, y entre medias se leía ésta de la soledad, y se la veía a ella sola (en la vida), deseando hablar, detrás de esos párpados de pasa, y yo pensaba en lo pesado que seré yo cuando llegue a viejo, pensaba en cómo andará de flaquito mi libro de verdades para entonces. Andamos cada vez más desnudos, o deberíamos hacerlo: vivir es ir quitándose ropa, ideas, trastos, hipotecas, crisis, michelines y contracturas. Yo aún llevo mucho puesto.

viernes, 5 de octubre de 2012

Llaves

(Mi llavero no tiene la llave del buzón, el de Marta sí).

Me das tus llaves para que pueda mirar el buzón cuando me vaya, o cuando vuelva, o las dos veces. Y eso es amor, porque me conoces y porque llevo días cansino con la carta que no llega, pero me das tus llaves y etcétera.

jueves, 4 de octubre de 2012

Llorones

Si no que se ahoguen, por lo menos que se atraganten con su llanto.

Sigo creyendo, cada vez más, qué cursi, qué antiguo, que la vida es del color del cristal con que se mira.

A mí la vida me ha sonreído, es verdad, por lo menos más que a mucha gente. No tiene mérito devolverle la sonrisa a la vida. Pero no hablo de mí, hablo de los que sonríen a la vida que les pone cara de ogro, de los que sacan flores del estiércol. Esos son los poetas, los felices, los valientes.

Y nosotros tengamos cuidado con que no nos salpique el llanto de los llorones, que contagia.

miércoles, 3 de octubre de 2012

Importante

Bodas, bautizos y comuniones, chistes negros, verdes y marrones, viajes largos, coches grandes, tías buenas: no me importan un comino, lo siento, no es por fastidiar, de verdad, ni por ser guay, es que no me importan.

O no les doy importancia, si queremos matizar, los veo como cáscara. No pasa nada, otros verán cáscara las cosas que a mí me importan

Ciegos políticos, deportivos o laborales, complejos de inferioridad, frases hechas y quejitas: estos no me interesan, que es más grave que que no me importen: me importa tenerlos lejos. Pero eso sería harina de otra entrada.

martes, 2 de octubre de 2012

Suavizante

¿Qué hacen las señoras para que tiendan y todo el Parque huela a suavizante?

lunes, 1 de octubre de 2012

Papá

Por aquí se te sigue tratando con ese título, lo cual dice mucho de ti, pero también de nosotros, que nos hemos quedado con el que fuiste y no con el que eres.

Tengo padre, lo decía el otro día mi DNI nuevo, pero no papá.

Me dicen que te diga dos o tres cosas, las que me rondan, no por ti (te va a dar igual, estás loco, no eres papá), sino por mí, que llevo los bolsillos llenos de piedras. Las estoy cociendo (este blog me ayuda, creo que nació para esto), cuando estén las sirvo.

sábado, 29 de septiembre de 2012

Prisas

Nunca es para tanto, dice Gonzalo Rojas. Todo es vanidad, o sea, todo es caduco, o sea, todo acaba cayendo, dice el Eclesiastés. Qué son 80 años, decía Javier Maíllo. 80 veces nadie, repite y responde Gonzalo Rojas.

No es humildad, es perspectiva. Y por tanto no es frase hecha, es convencimiento. ¿Cuándo me invadirá a mí esa paciencia, esa sabiduría? No vale con vivir, ya sabemos, hay que pegar bien la oreja y el ojo a lo que pasa para aprender las lecciones. Tiene gracia, voy con tanta prisa que nunca aprendo la lección de la paciencia.

viernes, 28 de septiembre de 2012

Yonqui con perro

Como título de cuadro, por ejemplo.

Esta tarde un yonqui llevaba de la correa un perrillo muy salao, y le iba diciendo no sé qué de a ver qué hacía ahora, "¿a ver qué haces ahora?", así, con un tonillo cariñoso, como de padre. Yo pensaba lo paradójico que es que alguien que apenas se gobierna, que apenas sabe cuidarse, ande cuidando de un animalillo. Es tierno, es una locura de las que a veces hacen los yonquis, es tal vez el último trocito de humanidad que le quede a un yonqui, la única parcela de amistad que le quede (¿los yonquis tienen amigos?, pensaba, ¿de quién puede fiarse un yonqui, si no puede fiarse ni de sí mismo?).

Un yonqui con perro sigue siendo la prueba de que la poesía existe.

jueves, 27 de septiembre de 2012

Lluvia

Por fin ha llovido. Y la lavanda y la jara se han acordado de cómo olían, han eructado su primer olor, algo parecido al olor de los recién nacidos.

Y además la tristeza, esa leve tristeza que trae el otoño y que levanta por fin el pie que teníamos en el verano y nos deja a dos patas en el invierno. Esta tristeza alegre que trae la lluvia.

(Mientras, en Galicia tu tristeza será de ceniza y musgo y segundero, tu tristeza estará sola, recordando quién sabe qué, qué fotos eligirá tu mente enfermita. Si yo pudiera te regalaría esta tristeza nuestra natural, de hojas cayendo, de charcos marrones, de gritos de recreo y etcétera, de lo normal, vamos. Pero tú ahora no la apreciarías, no entenderías que esta lluvia es otro pasito hacia la felicidad).

miércoles, 26 de septiembre de 2012

Casa

El olor, claro, el olor es lo primero cuando entras a casa. Y la luz, y los ruidos, las temperaturas, los papeles en la mesa, el sitio de las cosas.

En realidad, lo mismo que abrazarte.

miércoles, 19 de septiembre de 2012

Amor

Cambiarse de calzoncillos es otro rito del amor, de ese amor gotitas con que se quieren las parejas que se quieren. Cada gesto de la liturgia me trae a ti, agacharme al cajón, encoger la tripa, estirar la goma por los lados un par de veces quién sabe para qué.

Abrir la colcha de la cama para irse a dormir sigue teniendo los milímetros de tu olor, desarropar la almohada arropa mi ternura, que se da una vuelta de algodón en tu recuerdo.

lunes, 17 de septiembre de 2012

Domingo

Ayer fue domingo, y se notaba en la calle, en el color del sol en las paredes, que pega sin la urgencia del salario, en los relojes, que andan mucho más despacio, en los pelos recién peinados, el periódico en la mano.

Ayer todo siguió naciendo, creciendo, como siempre, vamos, porque nada se detiene. Pero sé que las cosas crecen a veces de un saltito, como nuestro amor cuando te doy un beso, como esas dos alubias cuando las acaricio, aunque sea con tela y con palabras de por medio.

sábado, 15 de septiembre de 2012

Dormir

Entre este murmullo, este ruido de consejos, ideas, preguntas, cálculos, Marta y los gordos deciden dormir, y seguramente soñar, que es todavía mejor, y la vida se va creando con sangre y carne y no sobre el papel o sobre el aire.

Qué envidia, qué bonita, qué tranquila la naturaleza, que sabe lo que tiene que hacer sea cual sea el valor del euríbor.

viernes, 14 de septiembre de 2012

Perdón

Yo no sé de eso, yo no perdono, yo quito peso, intencionalidad, mala leche a lo que la gente hace, o le añado que están locos, que son tontos, que pobres de ellos que sólo tienen mal para dar.

¿Sin sangrar por la herida? Pues yo creo que tampoco me miro la herida, que evito la herida, pero cualquier roce me la recuerda, señal de que, si no sangra, por lo menos anda sin cerrar.

No siempre puede decir uno la última palabra, a veces no puede decir ni una, igual todas esas palabras que no dijimos son las que van apareciendo poco a poco en estos blogs. A ver cuándo aparece el te perdono que ahora se me atasca en la garganta, en la herida.

miércoles, 12 de septiembre de 2012

Cobarde

Que viene del francés "coue", por la cola que esconden los perros cuando se asustan.

Pero da igual, tú lo que estás es loco, cola loca, cabeza de quince años. Piensas poco en casi todo y mucho en ti. Sientes poco (felices los que sienten, dice hoy el Evangelio).

Y hay más como tú, es mezcla curiosa y peligrosa y penosa la falta de sentimientos, el exceso de ego y los nudos cerebrales.

Y termino como siempre: porque te quiero me dueles.

martes, 11 de septiembre de 2012

Perfume

Los pinos lo saben, huelen mejor por las mañanas, al despertar, cuando el sol aprieta poco, porque el olor les sale más suave, sin estrujar, y aprovechan entonces para ligar. Luego, cuando el calor les pone a sudar y las chicharras no se callan, el aire pesa más, huelen a cuarentón de discoteca y Brummel y no hay quien los aguante.

A nosotros nos pasa lo contrario, al salir de casa nuestra colonia insulta. Hay que esperar a mediodía para oler lo adecuado, lo justo, lo erótico.

lunes, 10 de septiembre de 2012

Temblores

"Hemos perdido el norte", decía ayer en un vídeo Emilio Calatayud. Tampoco es eso, ese "hemos" no es tan grande, yo creo que es un "han". Pero sí es verdad que esos pocos hacen temblar nuestras ideas, nos hacen pensar que nuestro plan ya no vale, que la vida es otra vez la jungla y las tripas y los dientes. Asusta, es verdad, da miedo por si me muerden, pero también por si el que acaba mordiendo soy yo.

domingo, 9 de septiembre de 2012

Sentir

Decía José Hierro que con haber sentido una vez ya merecía la pena haber vivido.

Nos gusta sentir, dice Marina que decía Virginia Woolf, sea lo que sea.

He sentido tanto, dice Neruda, que no quepo en los libros.

Pensaba si traer alguien al mundo es darle cosas que sentir, pero no sea lo que sea, sino cosas buenas. Pensaba si por una sola cosa buena merece la pena sufrir mil malas. Pensaba en cómo resumirá la gente sus vidas antes de morir, qué páginas leerán, qué habrán dejado escrito en su cuaderno.

Ahogarse

Ahogarse de risa mientras corres, respirar a golpe de carcajada, cuando la carcajada te deja, y ahogarse un poco para tragar saliva y decir qué maravilla y que no se oiga casi nada, porque la palabra se queda agarrada a la nuez, o porque la palabra se queda corta, ahogarse por todo eso es muy bonito.

sábado, 8 de septiembre de 2012

Latidos

Son los latidos y no los pálpitos los que cambian la vida.

Era pumpumpumpum, no tatam, tatam, tatam. Era un latir con ganas de vivir, era el mismo latir que el de nosotros dos, nerviosos. He pensado si no estarían superponiéndose nuestros latidos sobre el de ellos, porque eran dos latidos, si nuestro latir no estaría entrando también en la sonda, si estaría confundiendo al aparato.

Si yo tuviera el oído de los linces, sabed que cada noche dormiría con mi cabeza en su tripa, encadenando ritmos, apretando sinfonías, descontando golpecito a golpecito el tiempo que os falta para nacer.

Si yo tuviera miedo de morirme volvería a esta tarde, a esa sala a oscuras, a esa paz, a esa confianza para decir son dos, a ese asombro de tecnología y naturaleza a la vez, de dos puntos de luz en mitad de la oscuridad.

jueves, 6 de septiembre de 2012

Metas

Me da que corro más despacio, que tengo un trantrán que no me cansa pero que tampoco me exige. Por eso veo a un tío corriendo 200 metros delante y me tiro a por él; no por ganarle, ya sabemos, sino por ganarme.

En cambio, me da que trabajo mejor, que 8 años no me han desgastado, me han hecho trabajar distinto, tirar con el lastre que ya sé que no puedo quitarme.

Para escribir también he tenido que ponerme una meta, una obligación. Voy a buscar una carrera en la que medirme, automedirme, como he buscado este blog para sentarme cada noche a ordenarme.

miércoles, 5 de septiembre de 2012

Temas

Corro y se me ocurren 3 temas para escribir en el blog. En el camino a casa se me habían ocurrido otros 2. Mientras me seco después de la ducha otro. Y luego no lo escribo, qué más da, lo que importa es masticarlo, esbozarlo, empezar a decirlo en voz muy bajita, tachar alguna palabra que sobra. Lo que importa es la actividad, el movimiento de las palabras otra vez en mi cabeza, en mis manos.

martes, 4 de septiembre de 2012

Olores

Hoy el día me ha olido a césped recién cortado, a cena de sopa (la primera sopa después del verano) en todo el barrio, a agrio en mis manos.

Hoy las pieles han empezado a lucir su marrón a la desesperada (la última falda del verano), hoy el sol picaba menos, llegaba menos directo, quiero decir, como despidiéndose desde la ventanilla de un tren en marcha. Se nos ha pasado el verano lleno de melocotones, de hojas verdes y de besos.

lunes, 3 de septiembre de 2012

Signo

Me entero de un signo precioso: en una boda hindú novio y novia tienen dos cacitos con agua, uno vierte su agua en la del otro: sus almas se juntan para siempre.

Dominó

Como la tía de Gila, a veces uno empieza a tirar de un padrastro y se despelleja. Me huelen los pies, me tiembla la tripa, me duele el brazo, la espalda, a quién voy a curar yo, a quién voy a educar yo, a quién voy a dar vida yo.

viernes, 31 de agosto de 2012

Dolor

Mira lo que has conseguido, le vuelve a decir, ahora como cansado, sabiendo que todo lo que dirá caerá en saco roto, has derribado a un peso gallo, has hecho daño a quien te quiere, has tambaleado nuestro plan, todo eso que te dije, todo eso que no ves, que no has visto, ciego, al salir corriendo a golpes.
No me creo tu dolor, y más, no me importa tu dolor. Me importa más el nuestro, que el tuyo es solo tuyo y el nuestro se multiplica por tantos como somos, y se divide, y se diluye y se contagia por tantos como somos.
Sobre dolor, el tratado lo hacemos nosotros. Los que lloran (con lágrimas secas) somos nosotros, los que apretamos dientes y manos y horas para hundir el dolor, a los que el dolor nos traspasa y nos deja rastro y lección y puertas nuevas en el corazón es a nosotros.

miércoles, 29 de agosto de 2012

Mira

Mira lo que has conseguido, le dice, entre triste y con desprecio, enfadado, como mirándose las manos vacías (pero no se las mira, le mira a la cara). Mira, ya no sé decirte qué tal andas sin que huela a hueco, ya no sé marcar tu número, ya no sé si la vida es lo que aprendí, la idea que yo tenía, o las cosas estrambóticas que pasan últimamente.

Mira, ya no hay marcha atrás, en ciertas cosas no hay deshacer como en el Word, se rasgan los trajes, se mojan los papeles, se pierden los miembros, los nervios, lo que sea, y ya no hay marcha atrás. Mira, somos flexibles, nuestro amor se estira hasta donde nunca pensamos, aguantamos horas bajo la lluvia, como las vacas, días de llorar, de incertidumbre, esperando con una paciencia desconocida a que escampe.

Mira lo que has conseguido, le dice sonriendo, me diste tanto que no has podido quitármelo de un golpe, en una mañana; me diste tanto que estoy siendo capaz de pasar por la lluvia. Mira, te perdono porque no tengo piedras que tirarte, porque mi amor no se ha roto, has tirado mucho y mi amor no se ha roto, se ha hecho más grande.

martes, 28 de agosto de 2012

Madureces

Todos tenemos nuestras pequeñas inmadureces. Enternece, la verdad. Gente que educa familias y que chulea de mili. Gente que tiene respuestas para tantas cosas y no para qué ponerse por las mañanas.

Tranquiliza que la gente a la que queremos, nuestras piedras, tengan todavía cosas de niños.

Repetirse

A algunos nos cuesta tanto aprender las lecciones que las repetimos cada dos por tres, para que no se nos olviden.

No quiero que este blog sea una verdad nueva tras otra (no hay tantas), pero no querría ser pesado.

lunes, 27 de agosto de 2012

Intenciones

Lo de hasta ahora ha sido una entrada de puntillas, para que no me vea nadie en la web. Ha sido casi malo, porque corre el riesgo de ser un listado de frases sabias, redondas, medidísimas. Yo lo que quiero es escribir, volver a aprender a escribir, ser fino como una espada, preciso. Y ser natural, y ser constante, pasar tantas veces por las palabras que salgan solas, que responda con soltura a base de forzarme. Y ser versátil, hablar de mucho, no caer en mis temas de siempre. Tener todos los días un hueco en la agenda, un picor en los dedos de romper a escribir.

sábado, 25 de agosto de 2012

Palabra

¿Y la palabra, la buena, la que dice, la que respira, la que mancha, dónde está? Y más, ¿la encontraré en este blog?

viernes, 24 de agosto de 2012

Tele

Si Sócrates viviera ahora, en vez de ir al mercado y decir aquello de "la cantidad de cosas que hay que no necesito", encendería la tele y diría lo mismo.