A mí me cuesta mucho ayudar; no porque no quiera, sino porque no sé. Me llega alguien con un problema, y no sé qué decir, no sé ni dónde poner las manos. Yo antes era de hablar mucho, de tirar de recetario. Últimamente me callo; supongo que voy aprendiendo que sé poco.
Marta me ayuda mucho. Su secreto tiene 2 patitas: escucha y empatía. Yo cojeo de las 2 piernas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario